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miércoles, 22 de febrero de 2023

Vulnerabilidades de la democracia

He publicado algunos artículos sobre el tema de la democracia y al efectuar una revisión profunda sobre mis publicaciones relacionadas con ese sistema político, consideré necesario crear y publicar una antología de ideas, que me parecen importantes de enfatizar, teniendo en cuenta que la democracia es una buena forma de gobierno que presenta actualmente cierto grado de deterioro, pues está sujeta a diversas vulnerabilidades y que es necesario salir de la caverna de la manipulación y la ignorancia mencionadas por Platón, mediante el uso del intelecto, para no ser sometidos y esclavizados por los peores sistemas de gobierno como son las oligarquías y las tiranías.

El libro VI de la Republica de Platón afirma que Sócrates planteaba, cómo las diversas formas de gobierno de las naciones sufrían una especie de metamorfosis degradante con el transcurrir del tiempo, que pasaba por cuatro fases las cuales eran: aristocracia gobierno de los ciudadanos más preparados–, oligarquía –gobierno de un pequeño grupo de: ricos, avaros, corruptos, insensibles y genocidas–, democracia –gobierno del pueblo– y finalmente tiranía –gobierno de una persona con poderes absolutos–.

El deterioro de la democracia conduce hacia la tiranía, porque ese sistema se distorsiona por aberraciones tales como son: el populismo, la demagogia, la ignorancia, la avaricia y la corrupción, donde algunos demagogos y estafadores se aprovechan de las carencias de los ciudadanos para infundirles miedo y dependencia, limitando sus libertades y vendiéndose como falsos salvadores y protectores, que para más inri tratan de atornillarse en el poder, debido a otra vulnerabilidad de la democracia que es permitir las reelecciones.

Además de las cuatro formas de gobierno mencionadas por Platón, actualmente existe un super poder mundial, llamado el estado profundo, que, sin ser elegido por nadie, se ha impuesto como el super gobierno de todos los países y que se puede considerar como una oligarquía global insaciable, que es conocida como el globalismo y está formada por élites: económicas, políticas y geopolíticas, que se encargan de decidir sobre el destino del mundo, los seres vivos y se han hecho dueñas de casi todo el poder político y los: activos, recursos y riquezas de la humanidad, a través de: la especulación financiera, el terror, el belicismo y la manipulación de las democracias y las tiranías.

Sócrates tenía sus reservas respecto a la democracia, como se evidencia cuando preguntó a su hermano Adimanto, que si estuvieran en un barco en medio del océano sería conveniente convocar a una elección para buscar dentro de los pasajeros a alguien que condujera la nave o sería mejor averiguar si existía algún capitán naval muy experimentado a bordo del barco, para que tomara el control de dicha embarcación.

Adicionalmente dicho filósofo consideraba, que hacer votar a las personas sin brindarles la información adecuada y una educación suficiente, era totalmente irresponsable, que carecía de cualquier justificación y que votar por cualquier líder demagogo o populista era arriesgado, pues los votantes podían ser influenciados por aspectos irrelevantes tales como la apariencia física o la retórica de los candidatos, sin considerar que así como para navegar se requieren calificaciones, para conducir a un país de manera exitosa o para ocupar cargos en asambleas y congresos nacionales, es aún más importante contar con: cualidades, habilidades y destrezas comprobadas, dentro de las cuales están las siguientes:

1.- Honestidad e integridad que son esenciales para ganarse la confianza, el respeto y el apoyo de los ciudadanos.

2.- Empatía y habilidad de escuchar para ponerse en el lugar de los demás y oírlos, pues debe comprender, abordar y solucionar los problemas y las necesidades de la población que lo eligió.

3.- Liderazgo y habilidades en la toma de decisiones, pues debe asumir el rol de líder real y tomar decisiones acertadas y oportunas para guiar al país hacia el éxito.

4.- Experiencia y conocimiento en cuestiones políticas, geopolíticas, económicas y sociales, para poder decidir con propiedad y de manera: sensata, racional, acertada y adecuada.

5.- Comunicación efectiva pues debe intercambiar información de forma: clara, precisa, concisa, eficiente y eficaz, con los ciudadanos y con el resto de la comunidad política y económica a niveles nacional e internacional.

6.- Visión y planificación a largo plazo que le permita ser un estadista real y tener un plan de gobierno factible para la nación, que debe poderlo implantar de manera eficiente y eficaz en su período como gobernante, sin perder el tiempo en confrontaciones estériles o en asuntos irrelevantes.

7.- Responsabilidad y transparencia pues debe rendir cuentas ante la población y el Congreso nacional, el cual debe ser un ente independiente, honorable y honesto, para poder equilibrar los poderes y evitar los abusos del poder ejecutivo y, además, debe ser capaz de defenestrar al presidente y a otros funcionarios, si hay causas válidas para hacerlo, en vez de estar compuesto por individuos que solo buscan cómo apropiarse de los bienes de la nación o recibir dineros provenientes de orígenes oscuros.

8.- Apertura al diálogo y la cooperación con otros líderes y países, para abordar los problemas locales y globales, promoviendo: los intercambios comerciales, la paz, el progreso, el bienestar, la prosperidad y la estabilidad: económica, social y política.

9.- Inteligencia para obtener una comprensión profunda de los problemas que enfrenta el país y cómo solucionarlos adecuadamente.

10.- Trabajo en equipo donde debe poder escoger y rodearse de los mejores asesores, administradores de recursos y expertos en las diversas áreas, para establecer relaciones productivas con los demás líderes y los elementos que forman su gobierno.

11.- Responsabilidad social y sensibilidad humana para comprometerse con la justicia social y trabajar en la mejora de las condiciones de vida de todos los ciudadanos sin exclusiones.

12.- Respeto de los derechos y la dignidad de todos los miembros de su comunidad, para tratar a todos los gobernados con equidad, que es una mezcla de justicia con igualdad y libertad.

13.- Supervisión y exigencia para hacerle seguimiento a los proyectos que se manejen durante su gobierno y tener cero tolerancias con colaboradores que sean ineficientes, incapaces o corruptos, quienes deben ser expulsados de sus funciones sin contemplación.

14.- Fortaleza e independencia para no ser: influenciado, manipulado, corrompido, sometido, engañado o extorsionado, en la toma de las decisiones, que siempre deben orientarse hacia la salvaguarda de los intereses supremos de la nación y sus habitantes.

La selección y elección de los candidatos apropiados para ejercer los gobiernos, es uno de los grandes problemas de la democracia en todos los tiempos, pues según Aristóteles esta se degenera o se corrompe, convirtiéndose en demagogia, donde para obtener el poder político se utiliza una estrategia basada en: la ignorancia de los ciudadanos, la retórica –habladera de paja–, la desinformación, la satanización de los contrincantes, la manipulación de los sentimientos de la gente y la propaganda política, en la que se invierten gran cantidad de recursos financieros en marketing político y encuestas amañadas hechas por alcahuetas, sin que interesen las calificaciones, la honestidad, ni las capacidades de los candidatos postulados para ocupar los cargos públicos y desafortunadamente, no es posible para los ciudadanos comunes: seleccionar, postular y elegir, libremente a los mejores ciudadanos con que cuentan los países, porque son los grupos elitescos financistas quienes imponen a sus elegidos.

Qué nos diría Sócrates de la democracia actual, que parece un circo romano sin que haya pan, donde a pesar de los cataclismos naturales, junto a las crisis globales que tienen al mundo sumido en el caos, la miseria y al borde de una guerra mundial, cuando se requiere el aporte de verdaderos estadistas, se proponen e imponen como candidatos a gobernantes a algunos individuos tales como son: comediantes, cómicos, payasos, humoristas, titiriteros, magos, brujos, encantadores de serpientes, populistas, influenciadores, mamadores de gallo y seudo dirigentes, cuyas obras más conocidas son enseñar sus posaderas en público o ser contadores de chistes obscenos.

Infortunadamente, existen ciertos candidatos que provienen de algunos partidos políticos y esos partidos necesitan financiamiento que pueden recibir del estado profundo o de élites económicas, compuestas en determinados casos por especuladores, delincuentes financieros, corruptos, falsos empresarios y traficantes de cualquier índole, siendo que esos financistas prefieren promover a ciudadanos con algún tipo de debilidad, rabo de paja, ignorantes e incapaces, que puedan ser sometidos, guiados, manipulados y extorsionados, para expoliar fácilmente los recursos y las riquezas de las naciones, por lo cual ignoran, desprecian y repudian a los mejores líderes, que tengan experiencia, capacidad, honestidad y libertad de criterio, virtudes que son fundamentales para lograr gobiernos: honestos, eficaces, eficientes y exitosos.

Esta anomalía de la democracia basada en el dinero y en los intereses solo de las élites, en vez de las necesidades de los ciudadanos y la solución de sus problemas, conduce a postular, financiar y llevar al poder a personas: desquiciadas, genocidas, ignorantes, sin escrúpulos y sin capacidades de negociación, que son capaces de dejar que sus países sean destruidos, para que grupos especulativos pertenecientes al estado profundo o a otros estafadores, sean los beneficiarios del remate de sus activos y recursos o de la reconstrucción de sus infraestructuras; que las naciones vecinas se involucren en aventuras bélicas que los dejarán arruinados y que puedan generar una tercera guerra mundial, como excusa para repudiar los pasivos monetarios y financieros astronómicos que han sido producto de malas praxis económicas a nivel global.

Por estas razones muchos electores pierden la fe, la confianza y la esperanza en los políticos, en los procesos electorales y en la democracia, lo que conduce a altos porcentajes de abstención en las votaciones, debido a que en las ofertas de candidatos electorales no se da la oportunidad de escoger a los mejores representantes, que puedan resolver los problemas existentes, porque los elegidos están más orientados a trabajar en función de los intereses propios y los de sus promotores, en vez de atender las necesidades de los ciudadanos, que se convierten en crisis humanitarias eternas con falsas expectativas de solución.


Saludos cordiales,


Alejandro Uribe: Economía y Política
Ingeniero, Consultor de Empresas e Investigador

Publicación Inicial: 22
 de febrero de 2023

en http://auribe-economia-y-politica.blogspot.com/

Nota: este artículo original de mi autoría, fue publicado en el prestigioso diario El Nacional, el 21 de febrero del 2023 y está en el enlace: Vulnerabilidades de la democracia

sábado, 19 de noviembre de 2022

Democracia y demagogia

En nuestra cultura occidental la democracia es muy apreciada y es considerada como la mejor forma de gobierno para nuestras naciones, pues al menos en teoría, de acuerdo a la etimología de origen griego de esta palabra, la democracia es el gobierno ejercido por el pueblo.

A pesar de nuestra valoración por este sistema político, ya en el siglo V antes de Cristo, el filósofo griego Sócrates tenía reservas respecto a sus bondades y así quedó manifestado en el libro la República escrito por Platón, cuando en un diálogo, Sócrates preguntaba a su hermano mayor Adimanto, que si estuviera en un barco en medio del océano sería conveniente convocar a una elección para buscar dentro de los pasajeros quien condujera la nave o sería mejor averiguar si existiera algún capitán experimentado a bordo del barco para que tomara el control de la situación.

Justamente, la selección y elección de los candidatos apropiados para ejercer los gobiernos, es uno de los grandes problemas de la democracia en todos los tiempos, pues según Aristóteles esta se degenera o se corrompe, convirtiéndose en demagogia, donde para obtener el poder político se utiliza una estrategia basada en: la ignorancia de los ciudadanos, la retórica habladera de paja–, la desinformación, la satanización del contrincante, la manipulación de los sentimientos de la gente y la propaganda política, en la que se invierten gran cantidad de recursos financieros en marketing y encuestas amañadas, sin que interesen las calificaciones, la honestidad, ni las capacidades de los candidatos postulados para ocupar los cargos públicos y desafortunadamente, no es posible para los ciudadanos comunes: seleccionar, postular y elegir, libremente a los mejores ciudadanos con que cuentan los países, porque son los grupos elitescos financistas quienes imponen a sus elegidos.

Tal como lo manifesté en un extenso artículo publicado el 11 de mayo de 2021, llamado Democracias con pies de barro en la realidad no ocurre la situación democrática ideal, donde el gobierno sea ejercido por el pueblo, debido a que los candidatos provienen de los partidos políticos y esos partidos necesitan financiamiento que reciben de élites económicas, compuestas en muchos casos por especuladores, delincuentes financieros, corruptos, falsos empresarios y hasta traficantes de cualquier índole y esos financistas prefieren promover a ciudadanos con algún tipo de debilidad, ignorantes e incapaces, que puedan ser sometidos, extorsionados, guiados y manipulados fácilmente, por lo cual ignoran, desprecian y repudian a los mejores líderes, que tengan experiencia, capacidad, honestidad y libertad de criterio, virtudes que son fundamentales para lograr gobiernos: honestos, eficaces, eficientes y exitosos.

Esta anomalía de la democracia basada en el dinero y en los intereses solo de las élites, en vez de las necesidades de los ciudadanos y la solución de sus problemas, no solo se observa en los países más pobres del mundo, sino también en las naciones más poderosas como es Estados Unidos –paradigma de la democracia– donde especuladores como George Soros aportaron grandes fondos al partido Demócrata para las campañas de Barack Obama, Hillary Clinton y Joe Biden y por otra parte, muchos fondos de la campaña de Donald Trump se recaudaron de al menos 80 multimillonarios.

Qué nos diría Sócrates de la democracia actual, que más bien parece un circo romano sin que haya pan –metáfora–, donde a pesar de las crisis globales que tienen al mundo sumido en el caos, la miseria y al borde de una guerra mundial, cuando se requiere el aporte de verdaderos estadistas, se proponen e imponen como candidatos a gobernantes a algunos individuos tales como son: comediantes, payasos, humoristas, titiriteros, magos, brujos, encantadores de serpientes, populistas, influenciadores y seudo dirigentes, cuya obra más conocida es enseñar sus posaderas en público.

Cuando cualquier ciudadano acepta ser postulado para ocupar un cargo público sin tener las calificaciones adecuadas, esta aceptación es su primer acto de corrupción, pero también pueden considerarse corruptos a quienes los promueven, para obtener el poder mediante el uso de la demagogia, que según los antiguos filósofos griegos termina convirtiéndose en tiranía.

Por otra parte, es bueno saber que si alguno de los líderes impuestos por las élites económicas se atreven a desobedecer a quienes los montaron en el poder, se utilizan diversos medios para acortar o entorpecer su mandato, donde puede haber entre otras acciones: diversos tipos de escándalo, impugnación de elecciones, devaluaciones monetarias, rebeliones y protestas financiadas, bloqueos y sanciones o hasta golpes de estado, entre otras herramientas de control político, para tratar de dominar a quien se desvíe de los propósitos para los que fue impuesto por sus financistas, que necesitan mantener el statu quo con sus malas artes, por los siglos de los siglos.

Estas son algunas de las razones por las cuales los electores pierden la fe, la confianza y la esperanza en los políticos y en los procesos electorales, lo que conduce a que haya altos porcentajes de abstención en las votaciones, debido a que en las ofertas de candidatos electorales no se da la oportunidad de escoger a los mejores representantes, que puedan resolver los problemas existentes, porque los elegidos están más orientados a trabajar en función de los intereses propios y los de sus promotores, en vez de atender las necesidades de los ciudadanos que se convierten en crisis humanitarias eternas con falsas expectativas de solución, en ambientes políticos donde aunque se vote no se elige.


Saludos cordiales,


Alejandro Uribe: Economía y Política
Ingeniero, Consultor de Empresas e Investigador

Publicación Inicial: 19
 de noviembre de 2022

en http://auribe-economia-y-politica.blogspot.com/

Nota: este artículo original de mi autoría, fue publicado en el prestigioso diario El Nacional, el 08 de noviembre del 2022 y está en el enlace: Democracia y demagogia

miércoles, 16 de noviembre de 2022

Es el dinero estúpido

El dinero es una figura física o virtual, generalmente aceptada por las personas como medio de pago, para realizar transacciones comerciales relacionadas con el intercambio de bienes o servicios, en sustitución del trueque y constituye un pasivo para quien lo emite y un activo para quien lo recibe.

Según Aristóteles, las funciones del dinero son: ser unidad de cuenta, unidad de intercambio y unidad de mantenimiento de valor, pero actualmente dichas funciones no se cumplen para ninguna de las monedas existentes, puesto que, al ser pasivos emitidos sin el respaldo de activos tangibles, dichas monedas dependen de la confianza en los entes emisores, por lo que el dinero actual, no sirve como unidad de medida universal del valor de lo intercambiado, ni tampoco sirve para ahorrar, como si lo hacen los metales preciosos, cuyo valor se conserva con el paso del tiempo.


Debido al deterioro del dinero fiduciario por fenómenos tales como la devaluación, la inflación y el repudio de las monedas de curso legal, que se convierten en basura por la expansión astronómica de la liquidez monetaria, históricamente han quedado en la ruina, la destrucción y el caos económico-social, diversos imperios poderosos, muchas naciones con sus empresas y ciudadanos, cuando sus economías colapsaron por las malas praxis monetarias y financieras, y para salir de las crisis auto generadas, se ha recurrido a las invasiones y a las guerras, donde el objetivo es apropiarse de los activos ajenos que representen algún valor para los países invasores quebrados y arruinados, donde lo primero que se busca es el oro almacenado en los bancos centrales y luego los yacimientos de otros minerales que son materias primas para producir energía, tales como son gas, petróleo, carbón, litio o elementos radiactivos, sin que importe lo que ocurra con las personas.

Para ilustrar lo dicho anteriormente, sin viajar tantos años en la historia, podemos mencionar las guerras e invasiones de Napoleón Bonaparte a sus vecinos de Europa, Asia y el Norte de África, después que Francia quedó en la ruina por la hiperinflación generada con la emisión monetaria desordenada que hicieron los líderes de la revolución francesa, acción que fue replicada luego por Adolfo Hitler después de la hiperinflación en la república de Weimar –Alemania de la post guerra, entre 1918 y 1933– donde se necesitaban carretillas llenas de billetes devaluados, que en vez de contarlos había que pesarlos, para poder comprar un pan, lo que condujo a la segunda guerra mundial.

Infortunadamente, las lecciones de la historia se ocultan o se olvidan a propósito y, por tanto, cada cierto tiempo se repiten los mismos errores monetarios y financieros con las mismas consecuencias funestas, de tal forma que actualmente estamos de nuevo en una distopía y al borde de una tercera guerra mundial, cuyas causas son exactamente iguales a las que justificaron acciones de genocidas como fueron Napoleón o Hitler en su momento, para invadir y expoliar a otras naciones.

Desde 1971 se implantó a nivel mundial una teoría fracasada y fraudulenta llamada keynesianismo, propuesta en 1936 por John M. Keynes, quien irresponsablemente recomendó a los gobiernos crear dinero de la nada sin medida y sin respaldo de activos tangibles, para financiar el gasto público, de tal manera que cuando otros pensadores económicos de su época le indicaban que en el mediano y en el largo plazo, esta mala praxis de expandir la liquidez exponencialmente, conduciría a la inflación y a la recesión en el futuro, Sir. Keynes les replicaba que “en el largo plazo todos estaríamos muertos”.

Esa teoría económica aún está vigente y haciendo estragos y así fue como los bancos centrales expandieron sus ofertas de dinero fiat creado de la nada y la banca comercial obtuvo autorización para crear dinero inorgánico adicional en forma de créditos, mediante figuras llamadas el multiplicador bancario y la reserva fraccionaria, donde debido a que se espera que no todos los clientes soliciten simultáneamente sus ahorros y depósitos, se creó otra regla llamada encaje legal, que le permite a los bancos comerciales prestar el dinero de sus clientes a tasas reales negativas, en forma alegre e irresponsable, por ser un dinero ajeno, de manera que si este encaje legal se estableciera entre 5% y 10% como ocurre en muchos países, eso significaría que los bancos pueden prestar entre el 95% y el 90% del dinero que sus clientes les entregaron para su guarda y custodia, quedando el riesgo de que al ocurrir corridas bancarias, se impongan corralitos financieros y los bancos centrales deban expandir aún más la liquidez monetaria, para auxiliar a los bancos quebrados e insolventes.

La emisión exponencial e irresponsable de dinero sin respaldo de activos tangibles, conduce inexorablemente a un apocalipsis económico, con cinturones de óxido y de miseria, desempleo, salarios miserables, migraciones, violencia y drogadicción, lo que finalmente conduce al belicismo, para darle la patada al tablero de juego cuando no hay otra forma de cumplir con los compromisos adquiridos, porque no es sustentable en el tiempo manejar monedas que no conserven su valor, aplicando leyes y reglas leoninas tales como son entre otras el multiplicador bancario y la disminución del encaje legal, que permiten a la banca no solo crear dinero inorgánico adicional de la nada, sino también apropiarse de los depósitos de sus clientes para prestarlos en muchos casos a estafadores y vividores, apologistas de la especulación-devaluación-inflación, sabiendo que sus deudas se diluirán en el futuro con trucos tales como: corralitos financieros, devaluaciones, control de cambios, impuestos sobrevenidos, inflación subyacente y finalmente acciones bélicas cuando todo falla.

Estas prácticas monetarias y financieras promovidas por supuestos expertos económicos –algunos de ellos también son vendedores de encuestas– conducen a quiebras bancarias, con banqueros y políticos corruptos, quienes se hacen inmensamente ricos e impunes, que huyen de sus países de origen y ocultan sus fondos en paraísos fiscales o en naciones de gobiernos alcahuetas, mientras los países afectados quedan quebrados y arruinados, por la aplicación recurrente de malas prácticas, que consisten en otorgar créditos a una élite parasitaria que ni trabaja ni produce nada, compuesta por: corruptos, estafadores, especuladores y delincuentes financieros, que se convierten en oligarcas y se apropian tras bastidores del poder económico y político de las naciones y que luego son quienes imponen a través de las seudo democracias deterioradas a políticos ignorantes e incapaces, que son muñecos de ventrílocuo, para que se encarguen de imponer reglas y leyes que favorezcan sus negocios y también para proteger a quienes los llevan y los mantienen en el poder de manera perpetua, tal como es el caso del especulador más reconocido a nivel mundial que es Mr. Soros, cuyo dinero mal habido, producto de la especulación financiera, sirve para promover fundaciones manipuladoras, a nombre de la libertad, la democracia y los derechos humanos, imponiendo a pelmazos en los gobiernos, gracias a las deficiencias actuales de las democracias y también proponiendo irresponsablemente hacerle guerras a otros países, en vez de facilitar la paz y la cooperación entre las diversas naciones del mundo.

Finalmente, una propuesta de cambio al paradigma monetario del dinero fiat eran las criptomonedas, pero resultaron ser otra estafa piramidal de esquema Ponzi, tal como se había pronosticado en este blog el 19-07-2017, en un artículo llamado El futuro de las criptomonedas según una visión heurística donde se indicaban algunas fallas de ese tipo de seudo dinero y se concluía con el siguiente párrafo:

“Si no se corrigen estas debilidades, las criptomonedas no servirán para el comercio real y solo serán útiles para especular como en un juego de monopolio, a diferencia que aquí muchos participantes ingenuamente colocan sus activos reales, que son adquiridos con monedas ficticias y los pocos ganadores se quedarán con todo a cambio de nada, por lo cual hay montañas rusas de precios con pendientes pronunciadas y su futuro es que al ser burbujas e ilusiones monetarias, fracasarán y serán un mal recuerdo, como han fracasado todas las monedas conocidas excepto: oro, plata u otros metales nobles, que son el dinero real por tener valor intrínseco”.

Muchos bancos centrales del mundo poseen grandes reservas de oro que están ociosas en depósitos subterráneos y podrían ser de utilidad para regresar al patrón oro con la ayuda del FMI, donde pueda crearse una moneda universal que sea unidad de medida y reserva de valor, que también permita desescalar los escarceos belicistas actuales que a nadie convienen, en beneficio de la paz, la cooperación y el intercambio comercial global libre y honesto.


Saludos cordiales,


Alejandro Uribe: Economía y Política
Ingeniero, Consultor de Empresas e Investigador

Publicación Inicial: 16
 de noviembre de 2022

en http://auribe-economia-y-politica.blogspot.com/

Nota: este artículo original de mi autoría, fue publicado en el prestigioso diario El Nacional, el 21 de junio del 2022 y está en el enlace: Es el dinero estúpido